El 'representativo' azteca sumó frente a Uruguay su tercera derrota consecutiva 0-1, en el certamen sudamericano y terminar su penosa participación en el último sitio y como el único equipo sin obtener un solo punto.
No por vestir la casaca de la selección mexicana, se puede decir que es el representativo nacional, en esta ocasión jugadores y cuerpo técnico dieron vergüenza, tanto en su accionar como en su actitud.
Cuando se va con un grupo de jugadores convocados de emergencia, luego de la indisciplina de ocho irresponsables y dirigidos por un técnico timorato y miedoso, no puede existir otro resultado que el último lugar.
A pesar de dos derrotas del conjunto mexicano, tenía la oportunidad de avanzar a la segunda ronda, siempre y cuando venciera a Uruguay, sin embargo, el técnico Luis Fernando Tena envió una alineación netamente defensiva.
Contra los uruguayos había que arriesgar, pero Tena, fiel a su estilo, prefirió evitar la goleada y no buscar una posible victoria. Es obvio que los mexicanos no tenían argumentos para ganar, pero si desde la banca el mensaje es derrotista no se puede hacer mucho.
Se puede justificar una falta de conjunción, pero jugar sin actitud es imperdonable. Esos que fueron a Argentina no deberán volver a vestir la verde, comenzando por Luis Fernando Tena, que no tiene ni la mínima idea de cómo dirigir a un representativo nacional.
Cómo hace 33 años, la selección mexicana regresa de tierras argentinas con tres derrotas y el último lugar a cuestas.
Fuente: aol latino
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